El presidente de la Comisión Europea, Jose Manuel Durao Barroso, y el primer ministro húngaro, Viktor Orban, cuyo país asumió la presidencia rotatoria de la UE el pasado 1 de enero, han acordado este viernes priorizar en los próximos seis meses la consolidación fiscal y lograr una mayor coordinación económica entre los Veintisiete.
"Los mercados están pidiendo ver una mayor coordinación económica a nivel europeo. Los mercados están enviando todos los días un mensaje muy claro de que Europa tiene que trabajar de manera más coordinada en lo que se refiere a las cuestiones económicas y financieras. No es cuestión de utopía o idealismo pedir un Gobierno económico y coordinación más fuertes", ha subrayado Barroso en rueda de prensa conjunta con Orban, al término de la tradicional reunión entre la Comisión y el Gobierno de la Presidencia rotatoria en el arranque de su semestre.
Barroso ha insistido en la necesidad de impulsar "la consolidación fiscal" en los Veintisiete y "reformas estructurales para mantener niveles más altos de competencia". "Sólo a través de reformas rigurosas de consolidación fiscal y reformas estructurales podemos romper el círculo vicioso de la deuda insostenible, el trastorno de los mercados financieros y un crecimiento económico bajo", ha puntualizado el portugués, para quien "Europa necesita tomarse en serio las reformas".
Orban ha insistido en que Europa "no puede vivir como lo ha hecho en los últimos 20 o 30 años" y en que debe ser más competitiva, ha pedido mercados laborales más flexibles" en Europa y ha asegurado que "la prioridad número uno" este semestre será "proteger y reforzar" al euro, al que Hungría confía en sumarse en el futuro. "El euro es el instrumento más importante para la integración europea", ha recordado.
El ex primer ministro portugués ha adelantado que la Comisión presentará el próximo miércoles la Encuesta Anual sobre Crecimiento en la UE con "recomendaciones" a los Veintisiete. "Se centrará en medidas clave que necesitamos adoptar en tres áreas fundamentales: la consolidación fiscal, las reformas estructurales y medidas para potenciar el crecimiento", ha explicado. "No sólo se trata de la consolidación fiscal. También necesitamos invertir en crecimiento", ha insistido Barroso.
SEMESTRE EUROPEO Y FONDO PERMANENTE
El primer ministro húngaro ha explicado que la presidencia húngara se centrará en la puesta en marcha del denominado "semestre europeo", "una de las medidas más importantes" para Hungría y supervisar el proceso para crear el fondo de rescate permanente, cuya entrada en funcionamiento está prevista en 2013.
Barroso espera que los Veintisiete y la Eurocámara den su visto bueno a las dos medidas "este semestre" y ha recordado que la puesta en marcha del semestre europeo supondrá "una revolución en la manera en que coordinamos nuestra planificación presupuestaria en la UE" al permitir "por primera vez" la evaluación "ex ante" de los presupuestos nacionales antes de su presentación parlamentaria. "El semestre europeo está en el corazón de la reforma de la estrategia económica y la UE, confío, cambiará la manera en la que los gobiernos diseñan sus políticas económicas y de gasto", ha apostillado.
Barroso y Orban se han mostrado confiados en el "éxito" de la presidencia húngara gracias a todo el trabajo de preparación de antelación. "Apoyaremos a la Presidencia húngara a pilotar las propuestas a puerto seguro antes del verano", ha recalcado Barroso, que ha agradecido especialmente la determinación de Budapest de "acelerar" las propuestas para reforzar el Gobierno económico de la Unión.
ENERGÍA Y AMPLIACIÓN
Al abordar la agenda de la próxima Cumbre Europea del 4 de febrero, que estará dedicada en exclusiva a las políticas energéticas y de innovación, Orban ha defendido que la cumbre se centre en "la liberalización del mercado interior de energía" y se ha mostrado convencido de que el acuerdo entre Hungría y Eslovaquia para unir sus redes de suministro "contribuirá significativamente a crear una red de alcance europeo", algo que ha celebrado Barroso, que también ha insistido en la necesidad de que los Veintisiete pacten medidas para mejorar en eficiencia energética.
Orban ha subrayado además el interés de Hungría en la estabilidad de los Balcanes occidentales y ha trasladado el "apoyo" de Budapest a la adhesión de Croacia y para dar "una perspectiva europea bastante clara" para Serbia. También ha dejado claro que la presidencia húngara apoyará los esfuerzos de Rumanía y Bulgaria para entrar en el espacio común sin fronteras Schengen, algo que rechazan tanto Francia como Alemania por entender que no están preparados.
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